Cómo convertir a tu biblioteca en una estrella de Instagram

11 septiembre, 2017 at 08:00

Las bibliotecas tienen todo lo necesario para convertirse en bookstagrammers de éxito. Principalmente hay tres cosas que son necesarias: los libros como materia prima, personas con grandes dotes de creatividad y, como no, una cuenta en Instagram. Tres ingredientes básicos y necesarios para hacer llegar y promocionar los libros y la lectura de una manera creativa y visual.

Las bibliotecas tienen todo lo necesario para convertirse en bookstagrammers de éxito

Y sí, es verdad, existe un alto componente de postureo en esto de hacer fotos a los libros de la biblioteca para luego compartirlas, pero no hay que olvidar que si de algo pueden presumir las bibliotecas (entre mil cosas más) es de los libros que tienen.

Isabel Bellido cuenta en Yorokobu algunas buenísimas técnicas a la hora de compartir las imágenes con libros a través de Instagram, como por ejemplo: coger todo lo que veamos a nuestro alrededor e incluirlo en la imagen, colocar ejemplares en lugares insospechados, utilizar las páginas de los libros que ya no sirven como atrezzo, sacar los libros a la calle, ordenar metodológicamente las cosas,…

Son los llamados bookstagrammers los responsables de haber puesto al libro en el centro de sus perfiles de Instagram, y parece haberles salido bien la jugada porque acumulan cientos de miles de seguidores. Junto a los booktubers han conseguido crear una comunidad que, aunque aún no ha echado raíces en España, acumula followers y usuarios de un continente a otro.

Excelentes recomendaciones para compartir las imágenes de los libros por la red social, a las que habría que sumar algunas más… y que nos cuentan en el canal de Youtube “Fiebre Lectora”, como por ejemplo: estar contentos con las fotos que hacemos, estar pendientes de la luz, filtros y la edición de las imágenes, ser activos en las publicaciones, elegir bien la temática de lo que se quiere mostrar, ser constantes, mirar lo que hacen otras cuentas, interactuar con la gente y con otros publicaciones, y (¡muy importante!) el uso de hashtags.

El poder de la unión de las bibliotecas

24 agosto, 2017 at 08:09

Defender a las bibliotecas es necesario e imprescindible en todos sus niveles. Desde las pequeñas bibliotecas locales hasta las grandes bibliotecas nacionales. Todas las bibliotecas tienen su razón de ser y su protagonismo social dentro de sus comunidades. Y sí, es verdad, no todas las bibliotecas son iguales… pero es que no todas las personas tienen las mismas necesidades y no todas las bibliotecas tienen los mismos roles dentro de la sociedad. Lo que está claro es que todas las bibliotecas unidas, tanto las grandes como las pequeñas, son mucho más fuertes.

Todas las bibliotecas unidas, tanto las grandes como las pequeñas, son mucho más fuertes

La Federación Internacional de Asociaciones de Bibliotecarios y Bibliotecas (IFLA) lleva un tiempo trabajando en esa línea de que la unión es la fuerza para el cambio. De hecho, el lema presidencial de Glòria Pérez-Salmerón (Presidenta Electa de la IFLA) es «Las bibliotecas: motores para el cambio», y donde los bibliotecarios son sus engranajes. Una clara muestra de intenciones de posicionamiento social y mundial de las bibliotecas, y que se trató de plasmar en los 17 objetivos de las bibliotecas para transformar el mundo presentados a la Agenda 2030 de las Naciones Unidas («Transformar nuestro mundo: la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible»).

Recientemente la IFLA ha elaborado un mapa mundial en el que visualizar el poder de la unión de las bibliotecas: «Library Map of the World. Visualising the Power of the United Library Field».

El Mapa de la IFLA de las Bibliotecas del Mundo responde a la necesidad vital del sector bibliotecario de recoger fielmente y compartir información básica sobre la situación de las bibliotecas en países de todo el mundo. […] Para que los países dispongan de pruebas para la defensa de las bibliotecas, el Mapa de las Bibliotecas del Mundo también proporcionará acceso a las historias para los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas (ODS), que demuestran cómo las bibliotecas de diferentes países contribuyen a los ODS y actúan como colaboradoras para atender las necesidades locales de desarrollo.

10 personas que llevan los libros y la lectura a otro nivel

5 julio, 2017 at 08:01

Hay personas que quieren compartir su amor por los libros y la lectura con el mundo. Personas que ven a los libros como un salvavidas social gracias a sus beneficios. Que quieren preservar el conocimiento y hacerlo accesible. Personas que llevan los libros a sitios donde la lectura debería ser la única arma a existir. Esas personas tienen nombre y apellido. Esas personas llevan los libros, la lectura y el conocimiento a otro nivel.

Conoce lo que estas personas están haciendo por el mundo de los libros y la lectura

Estamos seguros de que existen cientos de miles de personas que utilizan los libros y la lectura para luchar contra las injusticias sociales y la fiereza económica que hace que cada vez haya más gente desamparada. Personas que quieren que no se destruya el conocimiento ya creado y que busca que todas las personas tengan acceso a él sin importar su condición social o física. Personas que no buscan premios, pero que deberían ser merecedores de los mejores. Personas que ayudan, comparten y crean iniciativas alrededor de los libros, la lectura y las bibliotecas. Y es que detrás de cada proyecto e iniciativa hay, sin duda, que una gran persona que busca el crecimiento social y la igualdad de oportunidades.

Hace unos meses ya os hablamos de una serie de iniciativas que llevan los libros, la lectura y las bibliotecas allá donde estaban las personas… Hoy os queremos presentar a Pilar Mujica y su biblioteca ambulante gratuita, a Gianno Carbonero y su bar del que quitó las máquinas tragaperras para montar estanterías con libros harto de ver como se arruinaban sus clientes, al bibliotecario Colbert Nembhard y su iniciativa de lectura a niños indigentes, a Philani Dladla y las reseñas de libros que repartía entre conductores y viandantes en Sudáfrica, al ingeniero Carlos Madolell y su proyecto BraiBook, al basurero José Alberto Gutiérrez y su rescate de libros de la basura, al monje Columba Stewart y su salvación de manuscritos en zonas en guerra, a Luís Soriano y su ya famoso biblioburro, a Philippe Starck y el diseño de Ideas Box y al librero Ali Al-Moussawi que vende libros en su caminoneta por las calles de Bagdad. 10 personas que se merecen grandes premios… y qué mejor que empezar por ser reconocidos y difundir su buen hacer.