Los libros son un vehículo
ideal para la transmisión de historias, pensamientos e ideas. Es verdad que
puede haber libros que nos gusten más y libros que nos gusten menos por su
temática, pero cada uno de ellos tiene su público al que hay que respetar de
igual manera que nos gustaría que nos respetasen a nosotros. La prohibición de
la lectura o la censura de un libro no hace más que dar sentido a la frase del
escritor Heinrich Heine: «Ahí donde
se queman libros se acaba quemando también a los seres humanos». Y este año
esta frase tiene más sentido que nunca.
Como es habitual, la Oficina de Libertad Intelectual de la American Library Association (ALA) ha hecho pública la lista de los libros prohibidos, censurados o cuestionados en el año pasado. Esta vez la lista está formada por once libros ya que hubo un empate entre el libro número diez y el once. Además, mencionar que estos libros fueron quemados por un activista religioso para protestar contra el día del Orgullo de la ciudad de Orange.
Once libros fueron elegidos este año en lugar de los diez habituales, porque los números diez y once de la lista estaban empatados para la posición final. Ambos libros fueron quemados por un activista religioso en Orange City, Iowa, en octubre para protestar por el evento OC Pride de la ciudad. OIF amplió la lista para incluir ambos, a fin de destacar la intolerancia represiva ejemplificada por el acto de quemar libros y recordar que «el que destruye un buen libro, mata a la razón» (John Milton, Areopagitica).
El Instituto del Patrimonio Cultural de España (IPCE) se encarga de la investigación, conservación y restauración de los bienes que conforman el Patrimonio Cultural del país. La difusión tanto de sus fondos documentales como de los proyectos también es otro eje importante dentro de las funciones del Instituto. Es por ello por lo que han apostado por digitalizar y hacer accesible parte de sus fondos a través de su página web.
Tras un largo e intenso trabajo, se ha estrenado recientemente el catálogo en línea de los fondos documentales del Archivo General del Instituto del Patrimonio Cultural de España. Con la implementación del software MediaSearch, desarrollado por Baratz, se permite consultar y visualizar vía web el importante patrimonio documental custodiado por la institución cultural, que cuenta ya con más de 42 000 expedientes y documentos puestos a disposición del público.
El archivo guarda los expedientes relativos a los procesos de intervención en bienes culturales muebles e inmuebles realizados desde 1961 –informes, memorias, documentación gráfica y fotográfica–; el Archivo de la Guerra, que recoge la documentación producida por las dos instituciones creadas durante la Guerra Civil Española para proteger el patrimonio histórico español; y la Planoteca, que custodia los planos de iglesias, monasterios, palacios, castillos y conjuntos histórico-artísticos que en su mayoría fueron restaurados desde la década de 1940 hasta finales de los años 90 del siglo pasado. [Ministerio de Cultura y Deporte. El Archivo del Instituto del Patrimonio Cultural de España (IPCE), en línea]
Las bibliotecas pueden gestionar sus presupuestos a través de AbsysNet. Esto hace que no tengan que recurrir a otros programas contables con los cuales tramitar las partidas presupuestarias y las adquisiciones de fondos que decidan incorporar a sus catálogos bibliográficos. Eso sí, para que gestionar los presupuestos con AbsysNet le salgan a cuenta a las bibliotecas, vamos a repasar algunos aspectos que debemos tener claros para no liarnos con los números.
Desde hace un tiempo os venimos
explicando a través de diferentes Cápsulas cómo llevar la facturación
de la biblioteca a través de AbsysNet o la importancia del consenso y gestión
presupuestaria en la biblioteca. A través de esta nueva cápsula (in)formativa
vamos a tratar de explicar diferentes
formas de cerrar un presupuesto utilizando la funcionalidad que el sistema
incorpora para esta función.